Y así como las nubes que se forman sin saber dónde ni cómo, un dinosaurio llegó a la ciudad, no buscaba destruir ni crear mala fama a sus parientes prehistóricos, sólo buscaba un buen lugar donde vivir.
Encontró un pequeño lugar donde vivir, pero los dueños tenían hijos y le negaron el cuarto que se rentaba, pues tenían miedo de que lastimara a sus hijos.
Siguió buscando antes de encontrar una pequeña casa que se vendía, aunque no le alcanzaba pensó en preguntar para ver si podría tener una rebaja, pero el vendedor no lo aceptó, decía que era muy grande y derribaría la casa.
Caminaba sin rumbo cuando pasó por un parque, encontró mucha gente que lo miraba y se alejaba, sólo algunos niños curiosos que buscaban su compañía, pues era un dinosaurio, algo nuevo para los niños que no veían la maldad en las cosas, pero como siempre los padres los jalaban y huían del dinosaurio.
No encontraba un lugar donde estar, en todos los lugares que buscaba encontraban un pretexto para no dejarlo: que era muy alto, que era muy pobre, que era ruidoso, que asustaba a las personas, que comía mucho...
Mientras la luna se posaba sobre la ciudad un vagabundo se le acercó con un pedazo de cartón, se lo extendió en una esquina tranquila del parque para que pudiera dormir.
A la mañana siguiente el dinosaurio encontró un departamento fuera de la ciudad, incluyendo alimentación y un lugar espacioso, a cambio debía cuidar una casa cercana.
Regresó al parque para despedirse de su amigo vagabundo, como no tenía más dinero por haberlo gastado en comprar ese departamento le entregó un colmillo de los de atrás, que casi no usaba.
Y con el tiempo el vagabundo lo vendió a un museo donde después se volvió un conocido coleccionista prehistórico.
Y así es como el dinosaurio que llegó a vivir entre humanos logró hacer un amigo.
(Ay que cursi...)
Vendedor ambulante
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Mi vocabulario no viene de la educación formal
Hoy lo revolucionario radica en lo tradicional
Con tantos cambios se pierde tu individualidad
Las modas pasan...
Hace 3 semanas.
4 comentarios:
^^ dinosaurio!!!! Me gusta, me gusta... ah no, esto no es Facebook.
Que bonita historia, hace mucho que no leía de dinosaurios. Gracias!!
Yo soy un dinosaurio me cae que si. Si no... al tiempo!!
saludos cordiales amigo.
Lo primero: busca en Youtube la canción de El Dinosaurio Anacleto; creo que te hará sentido con lo que escribiste.
¿Qué se puede extraer de esta lectura? La moraleja de que las buenas acciones suelen ser recompensadas de formas en que no imaginamos. Saludos afectuosos, de corazón.
@Luis: Jaja creo que eso se me olvidó de poner como PD porque fue esa la cancnión que me inspiró a hacerlo, muy buena inspiración dan los chilenos.
saludos
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