Letras

Un día, cuando tenía como 10 años, creí que mi papá había perdido la razón, nos dijo (a mi hermano mayor y a mí) "desde mañana van a leer unos veinte minutos...". No recuerdo por qué (si es que lo supe alguna vez) ni qué más dijo pero para mí fue una pesadilla, al día siguiente no quería volver a casa porque tenía que leer, y así fue, leíamos 20 minutos cada uno, primero mi hermano leyendo "El misterio de Salem's Lot" de Stephen King. Luego yo, mi reto era "El Señor de los Anillos" de J.R.R. Tolkien, había visto ese libro unas cuantas veces sobre la mesa del comedor, lo leía mi papá, de ahí en fuera era nuevo para mí, nunca veía en el librero así que no sabía qué otros libros existían, cuando vi que tenía que leer ese libro creí que moriría de un derrame cerebral... pero ese libro fue el inicio de algo increíble.
"...un anillo para gobernarlos a todos..." Cuando termine la primera página quedé fascinado con el libro a tal grado que me metía bajo las cobijas para leerlo con la luz de una pobre lámpara de mano (después me comprarían una lámpara de mesa) pero lo terminé y activó más mi imaginación que hasta ahora me da problemas (por eso no pongo atención y me distraigo fácilmente), desde ese momento me han gustado las historias de fantasía que tienen buena historia (no como Harry Potter) pero ese momento mágico me abrió puertas a lo que aproximadamente 5 años después serían las letras en la blogosfera. Gracias a un amigo del bachillerato.
Desde que leí por primera vez el libro mi vida cambió, me refugie en los libros de muchas cosas, pero al final terminé por refugiarme en las letras virtuales de un blog que inició sólo como un proyecto de ocio, nunca creí que durara tanto, siempre pensé en abandonarlo varias veces pero regresaba sólo por compromiso hasta que se volvió mi desahogo. Ahora veo a las letras como mis amigas, sé que no las trato bien pero aún así dejan que les cuente mis secretos y los cuentan a los demás por este medio, me acompañan en las buenas y en las malas, me susurran y me escuchan, a veces quisieras que las letras me acompañaran a donde sea, por eso cada vez que puedo expresarme con ellas me extiendo demasiado para regresarles el favor que les debo, el favor de contar mi mundo, y claro, que mejor forma que contar su mundo desde mi punto de vista.