Todo lo que uno necesita no está fuera, está en uno, pero lo de afuera ayuda a estructurar lo que cada uno tiene, ayuda a encender el fuego y mantenerlo, pero es al final lo que un tiene eso que permite mantener encendido el fuego.
Cuando en esos días que no puedes más ni contigo mismo y quisieras correr y llorar sin razón aparente, es cuando te das cuenta que algo no funciona bien por dentro, y debes pedir ayuda fuera.
No es que no puedas, simplemente que necestas un epujón.
Al final uno cuenta su historia, tal abstracta comola vida misma...
Vendedor ambulante
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Mi vocabulario no viene de la educación formal
Hoy lo revolucionario radica en lo tradicional
Con tantos cambios se pierde tu individualidad
Las modas pasan...
Hace 3 semanas.
3 comentarios:
Es verdad, aunque aveces negamos que necesitamos ayuda, un empujoncito puede ser lo único que nos saque a flote.
Que bueno ver que aún sigues por aqui. Un abrazo!
No recuerdo donde leí que todas las personas tenemos diferentes vidas al mismo tiempo, y una vida (hablando de las diferentes vidas juntas) feliz requiere tanto de estar bien con uno mismo como de que los demás te acepten y te sientas reconocido por ellos.
Saludos.
O a veces lo que nos falla es que lo de adentro no se siente a gusto con lo de afuera, y es necesario que hallemos nuestro santuario para estar en paz.
Saludos!!
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