Y una noche podré volar un papalote sin que el viento mueve las nubes para tapare la luna, y podré ver a través de cada persona y encontrar mi lugar entre las estrellas, porque es ahí a donde vamos al final de morir.
Ni siquiera una muerte lejana pued einterrumpir el andar de la vida, porque seguimos siendo miles que día a día damos todo, y le robamos al mundo su energía, pero siempre nos tomamos un poco de descanso.
Ni el amor, ni la tristeza, ni ninguna emoción podrá contra lo que existe y lo que pasa. Ni la esperanza sobrevivirá a todo, sólo quedará la nada.
Pero yo esperaré subir a la cima de la montaña más alta con mi papalote y volar con él hacia el final.
Final del 2024
-
Este año fue muy crudo.
Crudo.
No encuentro mejor palabra para describirlo.
Mi salud, tanto física como mental, fue presionada contra los límites de lo ...
Hace 3 meses.
0 comentarios:
Publicar un comentario