Me he encontrado y me he perdido este año, de nuevo como seguro estaba cuando empecè este bog, y a los 7 años y más aún sigo buscando esa respuesta que parece nunca hallaré, quizá al final de mis días pueda ver un rostro cercano. He sido muy hipócrita conmigo mismo, porque sigo esforzándome en negar esa parte loca que me tiene en el lugar donde estoy, esa fuerza destructura pero que ha moldeado el camino, no me preocupa ahora que piensen que sea débil o calmado o pasivo o sereno, lo que me preocupa era que me vieran como eso que tanto oculto, lo agresivo, destructivo, vengativo incluso, eso me tiene más preocupado pero no sé desde qué momento.
Encajo bien así, en este momento pero no puedo pretender que el cauce del río siga por un camino cuesta arriba, no hay más esperanza en un mundo así que en la fantasía, tarde o temprano una verdad sale a flote y esa verdad es lo que cambia, el camino al cual el río regresa.
No es que sea mal momento es que necesitaba decirlo.
Ni propósito de año nuevo ni historia sin final, una expresión de algo que lleva tiempo guardado. Lo que me da mayor temor es lo que pueda desmoronar. Espero, sin embargo que algún día todo pueda expresar y nada se rompa de más.
Estoy en casa, un día nada más, no quiero que el hueco de la algarabía destruya lo que hay. Nuevas esperanzas comienzan y un camino más por empezar, pero recuerden que el sendero de la vida es el mismo sólo cambia cada año de nombre.
Feliz año nuevo a todos y les deseo lo mejor en todo lo que se propongan, incluso si no es algo bueno.
Vendedor ambulante
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Mi vocabulario no viene de la educación formal
Hoy lo revolucionario radica en lo tradicional
Con tantos cambios se pierde tu individualidad
Las modas pasan...
Hace 2 semanas.
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