Decadencia...

Al final el hombre fuerte y que todas desean se vuelve un anciano que apenas puede respirar, la mujer que buscaba comprar tiempo termina con huesos y plástico. Lo que alguna vez estuvo arriba terminó cayendo, lo que se levantaba no creció por siempre, los sueños ahora son historia.

Cuando la estrella que era antes se desmorona no se vuelve un estrella marchita o apagada, sigue brillando de forma intensa y de otra manera. Algunas personas se marchitan con elegancia y dejan un legado importante, pero hoy vemos a esas personas que en un momento brillaron, personas que ahora dominan las portadas de revistas, las notas de espectáculos, las que alegan sobre su identidad para conseguir un lugar en un restaurante.

Al final pueden seguir brillando pero seguirán siendo parodias de sí mismos, y a veces somos un sarcasmos de quienes fuimos, un recuerdo opacado por la decadencia. Lo que importa no es lo superficial, porque eso termina por caerse, lo de adentro de mantiene y vive por mucho tiempo.

En algún momento todos nos volvemos mensajeros, transmitimos la mortalidad y que en el juego de la superficialidad nada es para siempre, sólo se hace llamativo. Al final queines se rodeaban de gente sólo tienen recuerdos muertos a quienes sufrir, y los que vivían solos se quedan sin los únicos que los apoyaba, ellos mismos.

Todos caemos en una parodia de la belleza y cerca del final nos damos cuenta de que somos monumentos decadentes de lo que nuestro mejor tiempo fuimos. Aunque no importa quiénes fuimos o quiénes seremos, sino lo que somos.

Nuevo diseño...

Blogger manejaba un diseño nuevo desde hace tiempo pero no me había tomado la molestia en probarlo, y ahora no me tomo la molestia en buscar una versión anterior al diseño por falta de tiempo y el poco interés de permanecer mucho en Blogger por hoy.

Mi idea era escribir sobre lo que ha pasado los últimos días pero es que nada ha pasado en estos últimos días, nada relevante o que sea importante como para pensar en escribirlo, lo más emocionante es que faltan dos semanas antes de terminar con mis prácticas que de no ser por vacaciones esta sería mi última semana.

Y en esta semana también empiezan mis exámenes, y ya hay bastantes trabajos y muy poco tiempo en realidad para hacerlos, aunque dijera mi directora deberían recordar estos últimos semestres como los que más les costaron, yo le dijo "JÓDETE". Gracias directora.

Y antes de empezar a sacar el odio acumulado ante la directora mejor les digo que lamento no haber pasado por Blogger en estos días pero la cuestión de tiempo no  es una virtud que me ayude mucho en estos días, prometo pasar pronto a saludarlos.

En estos días donde el tiempo parece transcurrir tan lento o mis pensamientos alterados comienzan a levantar el polvo que en años se ha acumulado, me detengo a pensar en lo que no quiero, y es cuando escribo.

Pero luego veo que no tengo nada que escribir y sólo pensar, y quiero pensar pero no hay tiempo para ello, y cuando lo hay estoy en el lugar incorrecto, como ahora. Que tengo tiempo y todo pero no el lugar.

Nunca podremos tener lo que queremos? Sí, aunque siempre buscaremos más, por eso no tendremos todo.

Sombras

¿Alguna vez has sentido alguien detrás tuyo y al voltear no ves más que sombras?

¿No has escuchado murmullo y al poner atención desaparecen?

¿Has visto como la oscuridad se mueve y no te hace nada?

¿Realmente crees que la oscuridad no hace nada?

Ahí cada noche bajo tu cama, escondido en los armarios, sobre los tejado de las casas, en los callejones oscuros y entre las tumbas vacías nos puedes encontrar.

Nosotros alguna vez alimentamos tus miedos infantiles, pero cuando creces estás tan cansado que nos ignoras, por eso crees dejar de vernos.

Alguna vez alimentamos las fantasías, somos el combustible de los fantasmas, las luces brillantes en los pantanos, eso que tanto temes al abrir la puerta de tu casa al llegar de noche.

Somo el miedo que de niño te hace sentir solo, porque en realidad nunca estás solo, estamos contigo, todo el tiempo.

Frente al monitor

Me despierto y casi lo primero que hago es encender la computadora, espero avanzar tarea, porque es bastante. Pero no hago más que distraerme, nunca debieron inventar las redes sociales, ni siquiera el correo con 0 mensajes.

Claro, ni hablemos de Blogger...

Creo que hasta podría leer en este momento la letra chiquita de los términos y condiciones de alguna página.

Mejor iré a desayunar, luego veré qué pasa...

PD: No evito hacer tarea, un estómago lleno es un cerebro feliz y funcional.

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¿Les conté un cuento del niño que se estresó por no terminar rápido su tarea? Pues un día de estos lo contaré.

Medio...

Había una vez dos niños que jugaban, uno de ellos de lado de la muerte y el otro entre la vida y la muerte. Un niño y medio casi muerto, media vida que agonizaba, era su pase de entrada, la muerte esperando sólo aguardaba, el día que sus padres tanto temían.

A media noche sonaba debajo de la cama del niño medio muerto y medio vivo, un crujir de la madera y un viento helado despertaba, al niño medio muerto y medio vivo. Era tiempo de jugar, la hora de la diversión, pues su amigo muerto no tenía más que horas de oscuridad para poder divertirse.

Atrapaban hadas en pequeños frascos que luego olvidaban, por la mañana sólo polvo y piedras encontraban. La oscuridad los cubría, hasta salir el sol, cuando se retiraba y el silencio de la luz despertaba las almas vivas. En un momento de ilusión, el niño medio muerto y medio vivo se encontraba fuera de esa línea, se encontraba más muerto que vivo.

Y así es como sus padres lo encontraron, a la mañana siguiente, tanto fue su tortura que la enfermedad lo ha terminado. Punto final para los padres, que se culpan y sufren su destino, pero el niño todos días vuelve a su cama para seguir jugando con su otro amigo muerto.

Cansado...

En estos días me han pasado cosas extrañas cada vez que entro a Blogger, no es que salgan almas en pena de mi computadora o que reciba una llamada que anuncie mi muerte en una semana, sino que cada vez que entro a escribir algo la inspiración se va.

Durante el día ando muy inspirado y quisiera escribir algo, pero ni bien llego frente a la Blogger y la inspiración se va, entre mis dedos se va, ni siquiera escribir una palabra porque no sale nada.

Con el cerebro seco intento terminar esta publicación porque ni puedo quejarme bien, no es como esos típicos bloqueos que se tiene, sino es como esa flojera de levantarse cada día.

Es como si odiara Blogger... nah! Es como si me hubiera cansado de escribir... bueno no sé qué sea, pero es como si no tuviera ganas, y lo dejamos ahí.

Azar.

¿Qué lleva a escribir alguien una canción? Lo mismo que nos lleva a actuar diariamente.

La ente no tolera perder, por eso si es necesario, en su caída libre, como momento desesperado, puede fragmentarse, con tal de salvarse.