¡No hay ganas!

Tanto por escribir y nada de ganas, no hay alegría por usar lápiz y papel o abrir blogger en estos momentos, no es como antes.
No es que haya tristeza sino que no quiero escribir, no sé si sea normal, digo hay mucho que ha pasado y tanto que podría contar, cada día, cada minuto... cada momento de estos días tiene algo interesante y sorprendente como mi catarsis de ayer en terapia (que fácil y estúpida fue) o sobre Jengibre, la rata de laboratorio que estamos condicionando, o sobre los que rondan en mi vida, o sobre el nacimiento del hijo de una amiga... tantos temas pero ninguna motivación, me sorprende porque hace un par de semanas el mínimo suspiro de las hojas de un árbol activaban una gran cantidad de palabras que quería escribir...

Las palabras se fueron, y con ellas mis ganas, de hecho en algún momento una parte de mi dijo que quizá sea hora de abandonar jaja pero sé que no lo haré, otra etapa, no hay tristeza ni alegría, simplemente no hay ganas.