En mi mundo.

Cuando la gente se la pasa viviendo en el mundo de los demás deja de lado el mundo propio.

Cuando están navegando no pueden entender que no están en suelo sino en agua.

Ahora yo estoy en un viaje interno, no soy hippie ni usuario de alucinógenos, aunque debo admitir que siempre he querido probar hongos, y más que María Sabina vivió  en estas tierras.

Como sea no he estado  nada motivado cuando en los últimos meses en aparecer en esta vida virtual, eso no quiere decir que no pase a verlos sólo que no he comentado. Espero tener la motivación y el interés en un momento para poder regresar con más constancia.

Reflexión de mi vida por el momento.

¿No les ha pasado que están en el borde  de algo que ni saben nombrar y tienen tanto miedo caer como seguir ahí?

¿Alguna vez pensaron que la vida era lo peor que podría pasar?

¿Se han despertado un día sin tener la menor idea de lo que hacen despiertos?

Esos momentos en los que no tienes la menor idea de qué pasos seguirán a la tormenta pero si estás seguro que puedes seguir volando durante todo el día y dejar de lado a quien esté a tu cargo.

Vives el momento y olvidas que existe un futuro pero lo único que te aferra a seguir es el pasado. Viejos fantasmas que tocan tu puerta no para asustarte sino para llevarte, sólo a la muerte le temes.

Si no fuera por la gran soledad no tendrías nada.

Por un momento podría tomar una copa y beberla hasta perderme, hasta encontrar el final de la botella pero sentir cruda es algo que casi nunca me pasa, por eso arriesgarme a perder el dinero que no tengo mejor me acerco a lo natural.

Viajando desde mi cuarto y perdiéndome, espero que la montaña rusa termine de moverse.

Si fuera una escena de película estaría igual que ahora, en la cama escribiendo sólo a que a lado tendría una botella de whisky y un cigarro.

Al final viene la tristeza y la vergüenza.

Nunca pensé que estaría atrapado entre la realidad y lo real.